Se trata de una asignatura difícil que me ha costado aprobar, la de no
tener hijos, siempre fue mi sueño de niña, pero Dios no me los envió , he
aprendido a aceptar que él tiene
dispuesto otra cosa para mi , existen actualmente muchos avances en la
medicina, pero no son nada económicos y de fácil acceso, porque entre los
tratamientos traslados es toda una fortuna, y no te garantiza que lo puedas
lograr, recomiendo a quien tenga la posibilidad, que no la deje pasar si lo logra
será lo más gratificante que suceda en
su vida. También existe la opción de adopción dando así la oportunidad a un
niño que este necesitando una familia.
Lo difícil no es no tenerlos, es luchar
con la angustia personal, enfrentar las presiones de familiares y amigos y a su
vez proteger el matrimonio, que se
esfuerza en crecer pero se encuentra que el viaje es más difícil de lo que se
esperaba. Es una prueba que se debe superara en equipo (esposos), buscando
ayuda de profesionales, entendiendo que no somos los únicos, si se siente que
en vez de buscar un hijo se está buscando un culpable, es mejor detenerse y
luego continuar, es una constante lucha, con todo y la más fuerte es contra el tiempo, que va
demasiado rápido y con él se van muchísimas oportunidades, si eres profesional,
tu relación de pareja está bien, tu comunicación con Dios también, si solo
falta eso, lo más recomendable, es buscar calma y tener confianza en Dios para
que sea su voluntad lo que deba ocurrir. Si los hijos no llegan él te llevara de
su mano a donde encuentres como llenar el vacío y encuentres la paz que necesitas, nada
te atormentara, y mucho menos personas que no saben lo que te dicen, ni nada ni te tocara para destruirte. Confía en él.
Annabell Jiménez Pardo
Annabell Jiménez Pardo
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