Con
el pasar de los años, siempre están dándonos vueltas los amores que pasaron por
nuestras vidas, los que fueron solo ilusiones los que se dieron y los que no, muchas
veces no nos corresponden, y también muchas veces nosotros no correspondemos,
por las razones que consideremos, no llenan nuestras expectativas, no hubo
química, hay incompatibilidad de caracteres, o ya estamos comprometidos, he
leído mucho esa frase que dice “si no te quiere él se lo pierde”, claro que
sirve cuando no te corresponden pero cuando tu no correspondes no aplica,
ningún ser humano quiere despreciar a alguien, lastimarle, hacerle sentir mal, pero
si es importante saber cómo decirlo, ser honesto con mucha delicadeza y
respeto, explicar nuestro punto de vista y ofrecer la mejor de las amistades que en muchos casos resulta lo
mejor, se dan los mejores amigos y con el tiempo entendemos que no funcionaria
y que fue lo mejor.
Lo
más importante es pensar, no sólo con el corazón sino también con la razón,
puedes querer a alguien pero si esa relación no le conviene a tu vida, créeme
que no tendrás felicidad, siempre habrá dudas, inseguridad y eso acaba con
cualquier cosa. Dios siempre manda alguien para nosotros tarde o temprano
llegara y sabrás quien es, te complementara, te sentirás seguro, lo digo con
propiedad, lo antes descrito lo he vivido y ahora está conmigo la persona que
era para mí, no fuimos bendecidos con
hijos pero si con un gran amor, solo nos tenemos el uno al otro y somos esa
familia que Dios quiso que fuéramos.
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