En la familia de mi esposo como en la mía, es tradicional hacer un sancocho de gallina el primero de enero, el año pasado viajamos a recibirlo en Margarita y el 31 es el día del cumpleaños de mi esposo y con un grupo de amigos que encontramos decidimos estar en Playa el Agua a la media noche(esta por demás decir que es toda una experiencia recibirlo en el mar, es un ambiente que toda persona debe vivir que quede claro que no estoy hablando de santería ni nada parecido) se agrupan familias, personas de todas edades, de todas partes del país y también de distintas nacionalidades.
Mi experiencia en cuanto al sancocho radica en que planificamos hacer el sancocho de gallina el día siguiente en la casa de uno de los amigos, pero nos olvidamos de la fecha y que odisea es conseguir LA GALINA en Margarita un 31 de diciembre, recorrimos toda la isla supermercados, frigoríficos, pequeños abastos y nada. En uno de estos sitios nos recomendaron ir a un mercado que queda al final del boulevard Guevara y al llegar y ver mi esposo la forma en que eran sacrificadas ,se monto en el carro y dijo NO HA SANCOCHO MAÑANA. Yo pensé no hay aquí tampoco hay que hacer otra cosa para reunirnos y comenzaron a surgir nuevos planes y mi esposo aun no hablaba, hasta que alguien dijo hagamos una parrilla y fue lo acordado, llegando a la casa donde estábamos hospedados había un pequeño abasto y fuimos a comprar la carne y cual fue la sorpresa conseguimos la gallina ya beneficiada y dijimos tanto nadar para morir en la orilla teníamos tan cerca la gallina y recorrimos la isla buscándola.
Mi esposo se animo y buscamos las verduras papa, ocumo, ñame, apio, yuca, zanahoria, auyama, jojoto, cebolla, ají dulce, cebollín, apio España, pimentón, cilantro de monte y una ramita de canela, la gallina, agua y sal, el casabe oriental que es el mejor que he podido comer. Las mujeres nos encargamos de pelar las verduras y la hicimos en una olla grande, se utilizaron cuchillos para pelar las verduras, una tabla para picar el sofrito, para moverla una cuchara de madera y un cucharon para servirla. Los hombres se encargaron de la preparación mientras se tomaban unas frías, compartíamos anécdotas y se revelo el secreto de las gallinas del mercado. (Esta preparación fue el día 01 de enero)
La sopa fue servida en un plato no muy usual son unos envases hechos de tapara, me llamo mucho la atención como son preparados o curados la verdad no se la técnica, solo se que no se cuela el liquido a través de ella.
La verdad que detrás de un buen sancocho hay tantas variaciones como historias entre amigos y familiares, hay tantos dilemas entre nuestras formas de pensar y lo que nos gusta, (mi esposo y yo frente a nuestro respeto por los animales) pero ante una apetitosa sopa uno lo coloca de un lado por un momento. Y si me preguntan como quedo esa sopa? Volvería a recorrer la isla….
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